Jordi Sierra i Fabra, autor barcelonés de más de 600 libros, ganador de 60 premios literarios y cuyas obras han sido traducidas a más de 40 lenguas, estuvo presente en el Encuentro de Promotores de Lectura de la 38 Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL).
En su charla, “La literatura infantil vista por un niño de 77 años”, conversó con jóvenes escritores, profesores e investigadores sobre las distintas formas en que una persona puede llegar a crear libros y las formas en que “la locura” es beneficiosa para esta labor.
“Los buenos libros son como naranjas, una vez leídos nos dejan algo, nos enseñan a pensar y a hacernos preguntas, nos transforman y nos hacen entender el mundo”, declaró.
Sierra i Fabra creó en 2004 la Fundación Jordi Sierra i Fabra, y la Fundación Taller de Letras Jordi Sierra i Fabra en Medillín, Colombia; así como el premio con su nombre para escritores menores de 18 años y el Premio Antonia Cortijos desde 2022.
“Muchos me dicen que porque regalo mi dinero; no es que tenga mucho, pero aprendí que todo lo que tenemos debe compartirse, y qué mejor que hacerlo para que escritores jóvenes descubran que pueden concluir un libro”, relató.
Explicó que en cada una de las ediciones del premio, desde su creación, envía un correo electrónico a los 100 jóvenes seleccionados para concursar, y luego llama a los 30 creadores mejor calificados para saber cómo se sienten y qué es lo que descubrieron con la escritura.
“La gran mayoría de las veces me enorgullece saber que las y los jóvenes sienten la magia de la escritura. Su mayor revelación es siempre haber podido escribir un libro. Claro que pueden escribir, y quizás no sea bueno, pero no hay otra forma de ser un escritor que mantenerse escribiendo y concluir ideas”, contó Sierra i Fabra.
Desde su mirada, él es un loco, puesto que no común en el universo una persona cuerda que escriba 600 libros sólo por el placer de compartir sus emociones, done el dinero que gana lo destina a causas de jóvenes y cree que el mundo es un lugar que vale la pena a pesar de todo.
“Creo en cinco cosas que son la base literaria de todos mis libros y toda mi vida: paz, amor, respeto, honradez y esperanza. Mi vida y obra son completamente estas cinco cosas, no tengo nada más”, confesó.
Al calificarse de “hippie, tartamudo, lector voraz y vacacionista pensante”, el barcelonés retó a las y los jóvenes que quieren escribir a hacerlo, a ser rebeldes porque “los niños buenos siguen las reglas, los genios las rompen, y porque los rebeldes buscan la creatividad”.
“Para escribir debemos comenzar por querernos a nosotros mismos y aceptar los sentimientos; para llenar un libro de palabras hay que entender el sentimiento. De eso se alimenta el arte y lo hace explotar”, concluyó.
Atentamente
“Piensa y Trabaja”
“30 Años de la Autonomía de la Universidad de Guadalajara y de su organización en Red”
Guadalajara, Jalisco, 4 de diciembre de 2024
Texto: Valeria Estefania Jiménez Muñiz
Fotografía: Adriana González
Fuente: Portal UdeG: https://www.udg.mx/es/noticia/los-libros-son-como-naranjas-jordi-sierra-i-fabra